Todo sobre el oído

¿Cómo funciona el oído y nuestro sistema auditivo?

El oído humano es un sistema de análisis de sonidos extraordinariamente complejo, que es capaz de percibir sonidos en una gama muy amplia de intensidades y frecuencias.


Es importante conocer que nuestro sistema auditivo está conformado por un conversor de señales acústicas en impulsos nerviosos lo que comúnmente conocemos como el oído y el cerebro que es en donde realmente escuchamos.


El oído consta de tres partes;

  • El oído externo.
  • El oído medio.
  • El oído interno.


    El oído externo capta los sonidos. Las vibraciones sonoras se trasmiten a través del conducto auditivo (del oído externo) al tímpano, haciéndolo vibrar. El tímpano está conectado a una cadena de huesecillos (en el oído medio).


    El oído medio intensifica la energía de las vibraciones sonoras y las trasmite a la cóclea (oído interno).


    El oído interno recibe las vibraciones sonoras que entran a la cóclea, un caracol relleno de un líquido o, producen una onda, que viaja a través de la cóclea. Esta onda hace vibrar la membrana basilar, en la cual se encuentran miles de células minúsculas, llamadas células ciliadas, que registran las diferentes frecuencias sonoras. Las células ciliadas, que están conectadas a las fibras del nervio auditivo, producen señales electroquímicas que son transmitidas a través del nervio auditivo hasta el cerebro, donde se reconocen como sonidos y se procesan las señales de ambos oídos lo que nos permite reconocer el origen de la fuente sonora y priorizar un sonido por sobre otro.



    OTITIS

    La otitis, como cualquier otro proceso dinámico, se puede clasificar de acuerdo con la secuencia temporal de la enfermedad en aguda (duración de los síntomas entre 0 y 3 semanas), subaguda (de 3 a 12 semanas) y crónica (más de 12 semanas).


    Asimismo, dependiendo de la evolución de la otitis media, ésta puede presentar una efusión de líquido (otitis media seromucosa) en el oído medio que puede ser de tipo seroso (fluido, parecido al agua), mucoso (viscoso, parecido al moco) o purulento (pus).


    ¿Cuáles son los síntomas de la otitis?

    En la forma aguda de la enfermedad existe dolor de oído (otalgia), fiebre, tinnitus e irritabilidad.


    Con menos frecuencia se puede presentar otorrea (supuración), vértigo y más raramente parálisis facial.


    En la otitis media crónica con efusión, la pérdida de audición puede ser el único síntoma.


    Síntomas más habituales:

  • Dolor de oído.
  • Fiebre.
  • Otorrea.
  • Vértigo.


  • HIPOACUSIA

    La hipoacusia, también conocido como sordera parcial, es la disminución de la sensibilidad auditiva. Esto afecta a uno y ambos oídos y se puede presentar en diferentes tipos y grados.


    En cuanto a los tipos, pueden ser 3:

  • Hipoacusia neurosensorial: el problema reside en los órganos del oído interno, vinculados directamente al sistema nervioso.
  • Hipoacusia conductiva: la lesión se encuentra en el oído externo o en el oído medio, lo que impide detectar sonidos que provienen del exterior.
  • Hipoacusia mixta: el problema se encuentra tanto en los órganos conductivos como en el sistema neurosensorial.

  • En la escala de los grados se encuentran los siguientes:

  • Hipoacusia leve cuando al paciente le cuesta entender el habla en espacios ruidosos.
  • Hipoacusia moderada cuando es difícil entender el habla sin una prótesis auditiva.
  • Hipoacusia severa o profunda cuando el paciente necesitará prótesis auditivas o un implante.

  • Síntomas de la hipoacusia

    La hipoacusia puede presentarse en diferentes edades, por lo que los síntomas pueden variar. Entre los síntomas más comunes, pueden incluir algunas de las siguientes condiciones:

  • Percibir sonidos demasiado fuertes sin que en realidad lo sean.
  • Dificultad para seguir conversaciones cuando dos o más personas están hablando.
  • Dificultad para diferenciar sonidos agudos entre sí.
  • Mayor entendimiento de las voces masculinas.
  • Sensación de estar sin equilibrio o mareado.
  • Sensación de presión en el oído.

  • Otros síntomas pueden ser:

  • Sensación de pérdida de equilibrio o mareos.
  • Sensación de presión en el oído.
  • Zumbidos constantes.

  • ¿Cuáles son las causas de la hipoacusia?

    Las causas pueden ser por diferentes motivos. Algunos de ellos son los siguientes:

  • Edad. Las personas mayores de 65 años pueden sufrir pérdidas auditivas.
  • Ruido. La exposición prolongada puede generar pérdida de audición.
  • Infecciones. Virus y bacterias pueden dañar el oído, además de la otitis infantil no tratada.
  • Otosclerosis. Afecta a la movilidad de los huesos del oído medio, reduciendo la eficiencia en la trasmisión de las vibraciones.
  • Agentes “ortotóxicos”. Ciertos fármacos, alcohol y tabaco pueden perjudicar al oído.

  • ¿Se puede prevenir?

    La prevención se basa en evitar en la medida de lo posible, los factores de riesgo. Esto también depende de la causa que lo origina, es decir, si la hipoacusia es genética, la prevención no es posible.


    Es importante evitar volúmenes elevados, especialmente para promover una higiene auditiva saludable.


    ¿En qué consiste el tratamiento?

    El tratamiento varía dependiendo del grado de la patología. En los casos donde es leve o moderado, el tratamiento convencional es la colocación de un audífono.


    Para casos de hipoacusia profunda, se puede realizar un implante de conducción ósea que transmite el sonido a través del hueso del cráneo hasta el oído dañado. Es importante seguir las indicaciones de un otorrinolaringólogo.